CRONICA DE UNA PARTIDA DOLOROSA

Como de costumbre, esa mañana, me levanté temprano para realizar mis tareas cotidianas, de inmediato, me preparé para enfrentar un nuevo día.
Luego, de unas vueltas en el entorno, encendí el televisor para enterarme de las noticias de los diferentes programas matutinos. En esos momentos, El primer canal en sintonizar, emitía una dolorosa información, no pude decir ni una palabra, pues me quedé en shock, al contemplar una triste imagen, el rostro y la sonrisa única de Freddy Beras Goico, y a su lado, impresas dos fechas: 1940-2010. No pude contener el llanto, el sentimiento producido al ver aquella realidad, sin poder evitarlas, las lágrimas humedecieron mi rostro, Freddy, había muerto.

Entiendo, que sus quebrantos de salud eran delicados, pero Dios siempre le daba otra oportunidad de volver a la vida para así seguir alegrándonos y contagiándonos con su risa única.

Freddy, había ya atravezado el túnel oscuro y tenebroso por el que todos pasaremos algún día, pero esta desaparición, en particular, nos deja mucha tristeza y dolor, y en cierto modo, quedamos desamparados de clamor, pues él era la voz que representaba las voces de los dominicanos.

Freddy Beras Goico, era un auténtico patriota, que luchaba por las mejores causas, un hombre que era el sentir del pueblo. Se apagó una voz, pero no se apagó el legado que nos deja a todos, esos ideales que se llevó a la tumba y que debemos honrar con nuestras actuaciones de aquí en lo adelante.

Este polifacético y energético ciudadano del pueblo, nos deja el mejor de los recuerdos, porque siempre ideó ver a la República Dominicana, algún día, por el mejor de los senderos, pero ese sueño, sólo se logrará si todos ponemos un granito de arena en pro de una mejor nación, pero actuando con honestidad, humildad y dándole la mano al más necesitado. Siempre imaginé a Freddy, como presidente de la República Dominicana, pero sólo fue un sueño, él era apolítico, pues nunca tuvo tendencias por ningún partido político ni aceptó cargos. La mayor virtud de este maravilloso ser humano era ayudar a la gente más necesitada, tanto en las ayudas para salvar vidas, tanto de niños como de cualquier humano que lo necesitara, que hasta en sus últimos días estaba preocupado por los casos pendientes para ayuda.

Pasarán muchos años para que esta tierra vuelva a parir un hombre con la sensibilidad a flor de piel de Freddy Beras Goico, con esa personalidad suit generis, único, capaz de reírse hasta de sí mismo, su recuerdo quedará por siempre en nuestras memorias y corazones. Para que este recuerdo quede plasmado en el tiempo, porque se lo merece, sería buena idea proponer al congreso: Conmemorar cada 18 de noviembre, por sus grandes méritos, como Día Nacional a Freddy Beras Goico.

Freddy, sabemos que estás al lado de Dios, donde sólo los hombres de gran corazón descansan en paz!
Seguirás en nuestros corazones por siempre, porque nos dejas grandes enseñanzas, pero sobre todo, la promesa que te hacemos de ser mejores cada día. Freddy, sólo el cuerpo muere, pero los buenos recuerdos de tus acciones permanecerán por todas las generaciones!!

Décima a Freddy Beras Goico (Huchi Lora)

freddy gozaba el humor y a todos lo prodigaba.

Esa alegría regaba en todo su alrededor.

El era repartidor de la más sana alegría porque siempre la esparcía

como el polvo por la vida, y si él soltaba su risa todo el mundo se reía.